viernes, 21 de enero de 2011

Sin Corregir

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- Sabemos, porque escuchamos y preguntamos, que has trabajado en hogares con
  chicos, refugios, hecho teatro, tocado la guitarra, escrito, qué Sos?

- Diría que soy una especie de reciclador de alma, he hecho variadas cosas en mi vida pero por sobre todas he vivido. Estudié algunas materias que me han servido para comprender un poco de determinadas cuestiones, otras las aprendí porque circunstancialmente estaba en el momento, y por éste espíritu de reciclado del que hablo, aproveché la oportunidad, por aquello de que nunca se sabe cuando se puede necesitar. Y por sobre todo, creo que tuve una lucidez; atesoré esos momentos como para contarlos hoy, en forma de estrategias que sirven o intento que sirvan para resolver muchas veces cosas mínimas, pero que en definitiva son las que nos hacen feliz, o un poco más feliz. Esta costumbre o manía de juntar pedazos de cosas viejas, me llevó con los años, a estudiar una profesión que tiene que ver en algún punto con el reciclado, el armado y la revalorización de cosas en desuso (no habría que confundir precio con valor) y que no son incompatibles con las nuevas adquisiciones, estoy hablando en metáfora muchas veces, porque creo que algunos sentimientos que están como mal vistos, que tienen mala prensa, forman parte de esas cosas de las que hablo. La gente va dejando determinadas pertenencias tiradas por ahí porque en ese momento no les son útiles y después ocurre el olvido y cuando son necesarias las recuerdan y corren desesperadas a  buscarlas y no las encuentran. Ahí está la perturbación, el pánico y todo lo que preocupa al ser, en esas pequeñas cosas, que sirven, que nos reúnen;  juntarse ha hablar con alguien en la calle, con un vecino, llamar a un amigo, qué sé yo. Y como siempre digo cuando hablo con la gente de esto, que son ellos que saben donde las dejaron, donde las escondieron; si fuera médico, cosa para cual no serviría, les diría que son ellos los que van a hacer su propia receta, a su medida y que son los que saben la dosis que tomaran, que son los que firmaran su talonario, que por lo demás creo que es un derecho que ha sido vulnerado. Pues quien conoce su conflictiva está mejor preparado para salir de ella, claro que puede aparecer en una forma desconocida, y ahí es cuando se interviene para esclarecerla. Pero es solo eso, como un espejo donde mirarse y verse desde otro lugar.
Como se imaginarán, no me han dejado entrar a ningún lado con esta filosofía, y en aquellos en los que me he colado me han despedido a patadas. Y no es un orgullo. Porque el dolor es democrático, atraviesa estratos, capas, lo que sea. Y debería haber
aprendido cierta sutileza (de todos modos algo he mejorado) para poder así evitarme
un monto de angustia que está de más.
Pero lo que digo, en un noventa por ciento, es práctico, no es científico, no es académico, nada técnico, o no lo parece y ése es un precio que se paga, siempre me acuerdo del principito cuando cuenta de aquel tipo que encuentra un nuevo planeta y nadie le cree hasta que se cambia de ropa, es absurdo, raro al menos. Conocí mucha gente que está preparada para determinados oficios y que no pueden ejercerlo porque no tiene buena presencia. Es un mundo raro éste de la globalización y de la tolerancia. Pero es en el que vivimos y medianamente hay que jugar con esas reglas, no mucho, pero hay que estar preparado a sacrificar algunas cosas para poder entrar (en definitiva, la barba crece nuevamente) y cambiarlo desde adentro y no quedarse tirando piedra de la vereda de en frente, aunque a veces está bien hacerlo. Yo no hubiera acompañado a Gandhi, aunque me parece que fue un tipo bien intencionado y buen político por cierto, merece mi respeto. Pero nunca pude adherir absolutamente; si iba con los espiritualistas me decían que era muy político, si iba con los políticos se quejaban que era muy espiritual, y los juristas que muy pragmático y los idealistas que muy legislativo, nunca paré en ningún sitio, no pude, hoy sospecho que no quise, que hay una estructura de la que hablaré brevemente que hace que sea inestable, inquieto.

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- Qué es específicamente la Psicología Social ? Tiene definición ?

- Supongo que si. Les diría que es una Disciplina que te permite ser Indisciplinado.

- A que te referís ?

- Partimos de la premisa que el individuo está determinado por el medio y el rol que
  ocupa. De ahí es que prefiero romper con la formalidad de la intervención y voy al
  lugar a ver que pasa. A observar y plantear un modelo posible de operación, de
  mejoramiento. A veces es posible y si no hay que derivar. Alejarse de la omnipotencia
  es el mejor negocio que podemos hacer con nosotros mismos.

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- Te escuchamos hablar con mucha insistencia sobre la diferencia entre prevención y
   La terapéutica. Eso tiene que ver con política ?

- También supongo que si. Cuando me dediqué a estudiar ya era viejo (pero no solo de peces vive el hombre…eso lo aprendí hace poco) y tuve que hacer alguna que otra terapia y estuvo bueno. Conocí formas que ahora aplico y en determinadas situaciones funcionan bien. De esas terapias, cortas, focales, pero ricas en la discusión, salieron cosas buenas, que al menos me dieron mucha gracia (incompatiblemente con mi cara tengo un humor salvador y de todos lo colores), de ahí surgió que tengo cierta marginalidad, cierta emergencia y un carácter contingente; no voy a aburrir con mis mecanismos de defensa pero diré que cada terapeuta que visitaba me agregaba uno para mi colección.
Más sí, voy a contar, porque nobleza obliga, algo que me dijo el último terapista que visité (a quién respeté desde el primer día hasta el último. Nos vimos cuatro veces), el hombre me contó el final de un cuento de Horacio Quiroga (que había leído en mi infancia) y me devolvió: Usted es como un arqueólogo emocional, pero tiene un problema que resolverá después de esto que le diga. Usted desea ser Museólogo pero no podrá serlo porque su capacidad es otra: refiere a que usted tiene la capacidad de encontrar emociones, sentimientos donde nadie los ve, pero luego que los halla el trabajo está concluido y debe seguir en busca de otro, no puede conservarlo, quizá solo una muestra, pero no puede cargar con todos los hallazgos, ese es trabajo estático, de museo. Cuando salí, luego de agradecerle y decirle que no volvería (le agradezco – me dijo),   me fui pensando - éste tipo está más loco que yo – con el tiempo comprendí, se cerró el circulo en mi cabeza. Mientras viva le estaré agradecido. El tipo me dió una enseñanza. En cuatro entrevistas me dijo – tratá de hacer aquello que se aproxime a lo que querés y a la capacidad que tenés para hacerlo. Porqué recuerdo a Eduardo (así se llama), porque lo dijo en un momento en que mi atención estaba totalmente dispuesta a la devolución, quizá todos me dijeron lo mismo, pero la forma era diferente, la preparación era diferente, y cuando alguien está perturbado, confundido, o algo, hay que estar muy alerta para decirle lo que se le va a decir y no dejar pasar el momento, ni antes ni después, ahí radica el oficio, y se debe estar preparado en la confianza para que el prejuicio no intervenga, lo que se dice muchas veces no es lo que la persona quiere escuchar, a veces es un balde de agua fría, un escombronazo. La gente se va descreída como vino, angustiada como vino, odiándote porque vino a pedir ayuda y vos le decís que son ellos que van a salir de la crisis, que no sos un bastón, que vino caminando, o arrastrándose y quizá se vaya de la misma forma. Y te reprochan – pero entonces sos un ladrón – y ahí es cuando ocurre el milagro: cuando le decís – sos vos el que te vas curar, el que vas a decirte esto lo quiero para mi, esto no. Te empiezan a mirar con curiosidad y cambian la postura del cuerpo, a la próxima cambian el semblante, la actitud, porque son escuchados, alguien se toma el tiempo para escucharlos, les prestas atención (es una mierda que haya que cobrar por eso, no debería ser así, pero demuestra qué solo  nos sentimos, que individualista nos hemos convertido, cómo el consumo por sí mismo nos compró la cabeza y el alma y todo) y se sienten queridos. A esto, a esta contradicción o confusión, que estamos viviendo, le llamo el CONTRA – NARCISO, no se si existe la palabra y la teoría, antes me preocupaba por saber si innovaba, ahora no me importa, si algo me gusta lo adopto, y esta palabra compuesta la adopté porque me parece que ahí está la trampa social del sistema de consumo: te individualizan cada vez más, te proponen ser cada vez más vos y bien diferenciado de los demás, ser el único en la tierra, y cuando lo lográs, zás, te das cuenta que estás más solo que Adán. Llegás a amarte como el ser más excepcional que existe en el universo, tenés hasta el lago propio y le pones un espejo en lugar de agua para que nadie venga a joderte con una piedrita cuando te estás mirando en él. Pero nadie te dice que un día podés levantarte y todo ese amor que te tenías, desapareció, y empezás a odiarte, te auto-divorcias, te viene el viejazo, separas más aún la cabeza del cuerpo, entonces empezás a no aceptarte, claro que primero tratás de proyectar para fuera buscando culpables, pero como estabas solo nadie te da bola, en todo caso ese amigo, resentido, pero que tiene el corazón de un boludo, te escupe en la cara – y qué esperabas, si vos mismo te dejaste solo – ahí rompes, es cuando rompes todo, con todo y todos, te enfermás, cuando alguien te dice la verdad, te enfermás por la forma en que te enterás. Y recuperar aquello no es tarea de un día para otro. Por eso el negocio es saber que tenés que reconocerte, saber quien sos y cómo sos con lo demás, algún mensaje te mandan, pero se está tan concentrado en defender que ni te das cuenta. Una amiga y maestra (Helena) dijo un día: conocerse para no enloquecerse. Qué claridad.
Promover un espacio psicológico una vez al año (y por tres meses al menos) sería la mejor inversión que pudiera hacer un gobierno en su política de salud integral.
Lo he visto; cuando le empezás a mostrar como funciona una cabeza a alguien, y luego su propia cabeza, les empezás a mostrar sus manías, sus miedos, y empiezan a comprender por donde anduvieron y que muchas veces llagaron hasta ahí ciegos, terminan con la fatiga, comienzan a vislumbrar un camino de regreso pero que no es por el mismo lugar que ingresaron, que no tienen que caminar de espaldas para salir a la luz nuevamente, y toda esa nueva concepción de lo que es una terapia, que llamo orientación simplemente, es esperanzadora, porque no te da la imagen de volver a recorrer el camino que tanto dolor te dio transitarlo. En lo que es personal trabajo mucho con la mentira y la ironía, algo que se me critica, y les digo que miento cuando digo que trabajo con la mentira, porque es otra cosa, hay un error en la acepción. Estudié mucho antes de decir o escribir esto, lo pensé mucho, no me quedé con la definición fría, hubiera sido como quedarme solo con que negación es eso y nada más, o imaginación o fantasía. Hay algo detrás de la mentira o por debajo, que sostiene al mundo. Es una verdad que no se acepta fácilmente, no es fácil pensar en términos de verdad. No es simple decirle a una persona que la muerte es algo que llega indefectiblemente. Y mucho menos fácil decírselo horas antes. Donde no hubo una preparación, si es que es cierto que puede haberla. Le decís a un loco que es esquizofrénico, se te ríe en la cara y te dice chocolate… Si se lo decís a alguien que jura estar sano y que mataría por defender esa convicción lo mismo, lo pones en primera fila a un ataque de pánico. Y todavía tenés doble trabajo. He visto esto. Hay quienes optan
por éste camino, porque asegura tiempo y el tiempo cotiza. Por eso hablo de la
diferencia. La prevención no paga. Pero…cuando se comprenda al punto aquello que
al Cesar lo que es del Cesar… se encontrará el equilibrio.

Bueno, pero me fui del tema. Retomo: el espejo en que nos miramos es el otro, el que te confirma o te niega, y ahí está la base de todas las patologías porque desde hace mucho tiempo a esta parte la individualidad (generada perversamente por el temor a no ser nadie que promueve el sistema – me acuerdo que cuando era chico y no se si ahora lo siguen diciendo, los viejos insistían que tenías que estudiar para: ser ALGUIEN en la vida) te arrastra a desconocer al otro, es casi un ser infradotado y, a su vez admirar a determinados íconos que son como superman, se los vende como héroes imaginarios. Y claro que hay seres humanos que marcan un camino por su idea, su trayectoria, pero son reales y pueden estar en cualquier país o en tu barrio, pueden ser conocidos a gran escala o desconocidos. Y en realidad cuando haces eso te desconoces vos, es una trampa muy inteligente por parte de quienes tienen mayor incidencias en el sistema en cuanto a marcar tendencias en todos los ámbitos (todos calzamos nike, la marca de la pipa). En esto nadie queda afuera. Tengo muchos amigos y muchos enemigos por suerte. Nunca los conté pero la variable es mínima. Tengo algunos amigos futbolistas, políticos, artistas, trabajadores de diferentes rubros que se han dedicado siempre a lo mismo. Una vez uno de ellos me dijo: de todo un poquito no?. Y me quedé pensando. Es cierto, nunca hice algo durante mucho tiempo, no me llevo bien con la estática, parece. Pero puedo contar con un acervo de historias, de gente que me crucé, que me cruzaron en el camino recorrido hasta ahora. Y pude verme en ellos, me representaron lo bueno y lo malo que comparto con la humanidad. Acepté al mundo tal cual es aunque solo pueda verlo recortado. Desde un lugar de mi historia y proyecciones. Mis referencias del mundo y mi adaptación a él, que no ha sido fácil. Es un mundo que no cumple el sueño prometido, el cuento contado a los niños (aunque vengo del país en que se cantaba: la farolera tropezó, y que sepa bordar las medias al general).
Hay una brecha entre lo que se desea y la posibilidad de realizarlo, que da pánico, literalmente da pánico. Paraliza comprender que nos dan manija sobre lo que somos capaces de hacer y que no tenés que frustrarte ni detenerte y de pronto envalentonado con tu humilde hondita te enfrentas con un gigante y no te dicen que tenés que encontrarle el talón, y vos le tirás  y las piedras le rebotan. Y pasás toda tu vida tirando piedras a los aviones. Por otro lado te suena en la cabeza que todo sale - un ojo de la cara – saben de dónde salió ese dicho; de la mitología nórdica. Odín dio un ojo a cambio de sabiduría. Y así toda la vida se transforma en una guerra injusta, porque no te enseñan a pensar una estrategia, hablo del sistema, hace muchísimos años que el sistema educativo sectoriza la educación, hace un filtro tendencioso, y nadie habla de eso. Estoy refiriéndome a la MATEMÁTICA, como su mejor arma de dominio; dejaron de enseñarla, y todos creímos que el daño venía por el lado de la historia, que también existe porque un país sin el reconocimiento de su propia historia es un país pobre culturalmente. Pero al servicio del capitalismo feroz, todo el sistema educativo, de enseñanza, minimizó la matemática, entonces un ser que no sepa de dividendos mal puede entender como lo estafan, puede sospecharlo, pero a la hora de sacar una cuenta para reclamar que su hora hombre debe ser remunerada de determinada manera falla. Entonces nos llamamos orgullosamente país de servicio, pero quienes administran ese servicio cobran fortunas. La matemática te posibilita hacer esquemas mentales, visualizar proyectos, entender música, comprender arte, etc; No solo la matemática, pero por alguna razón la dejaron de enseñar en la escuela. Y si no pensemos. Lo chicos de hoy no son más inteligentes que los de antes, solo acceden a la computadora por el simple hecho de conectarse con el Facebook, el twiter y, por ese simple hecho obtuvieron una autonomía que asusta a los viejos. Y tienen en sus manos un mundo de posibilidades que ni siquiera sospechamos, pero ojo, no es garantía que vayan a cambiar algo. Siguen si saber resolver economías, economías en el más amplio espectro. Estamos más conectados y comunicados y está muy bueno que así sea, pero no estamos más libres del poder que domina. Casacuberta dice una idea (al menos se la escuché a él) que me gusta, dice que nos confundimos, hay un error de semántica, dice algo así: cuando no había que elegir éramos menos libres, cuando pudimos elegir entre dos cosas pudimos sentirnos libres de decidir, hoy en este mundo donde abundan los objetos a elegir creemos que somos más libres aún. Y es una mentira tácita. La libertad está en la decisión de elegir y no en la cantidad de objetos entre los que hay que elegir. No quedó claro: si voy a comprar un auto, así tenga dos para elegir o cien voy a usar la misma capacidad de elegir. No tengo más libertad de elección. En todo caso cuento con más posibilidades para esa única libertad. Con esto quiero decir que no es fácil elegir estar un poco más sano que enfermo. No se puede elegir con la misma libertad la salud. El mismo sistema que vela por la salud de la población hace todo para enfermarla. Hablando estrictamente de psicología, aún no hay un respeto, una concientización sobre la salud mental. Soy padre de una niña y cuando su madre estaba embarazada pasó por todos los chequeos habidos y sin embargo nunca por la consulta psicológica, era una mujer que sería madre por primera vez e imagino la ansiedad que puede provocar ese acontecimiento (puedo hablar del mío horas…) y nadie le aconsejó una breve consulta. Cuando pregunté al respecto me miraron con ojos extraños, como que no entendieran lo que estaba diciendo. Le preguntaron a la madre si estaba deprimida, o sea se me rieron en la cara, pero tampoco le dijeron sobre la depresión post – parto. Nos encontramos con un conflicto que solo tres años después pudimos más o menos resolver. En fin… a falta de psicólogos buenos son los juzgados de familia. Por esto y otras cosas la vida me llevó a adquirir cierta comprensión que ahora trato de volcar en el trabajo de reparación vincular.

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- Dicen que sos medio ermitaño. Como se entiende que tengas un trabajo social, que
   te guste la gente y a su vez quieras estar solo ?

- Me jodiste… heee…soy medio paranoico (pero no le digan a nadie si?) vamos a mentir que soy reflexivo y practico la meditación.

- Te divierte la gente ? (la chica que estuvo callada mucho tiempo)

- No me queda clara la pregunta…

- Está bien, fue una pregunta tramposa (risas) quise preguntar si te parece que los
   problemas de la gente son algo que se inventan a si mismas ?
   Como hablaste de la ironía se me ocurre que en un punto de reís de algunas cosas que
   los demás no nos reímos.

- Te pedí que reformularas, no porque no haya entendido, sino porque trabajamos con la
   palabra y muchas veces confundimos y por temor a preguntar y quedar como
   estúpidos terminamos respondiendo a preguntas diferentes, que sobre interpretamos.
   A tu pregunta: no creo que los problemas de la gente sean algo que se inventan, son
   reales, existen, y se portavocean de alguna forma. Sucede que cuando estamos mal
   muchas veces regresamos a estadíos primitivos, nos volvemos infantiles frente a cosas
   que son de adultos. Pero es inmanejable, salvo que tengas una preparación emocional.
   Entonces cuando uno se vuelve circunstancialmente niño, regresivo, comienza a ver y
   sentir como los niños, a confundir realidad con fantasía y eso es jodido, muchos no
   vuelven, por diferentes razones. Cuando uno se enferma hay una reacomodación
    bio-psico-social. Lo que hice antes y hasta ahora ya no me sirve, debo practicar unas
   nuevas formas de enfrentar al mundo. Y como en todo, hay ensayo y error. No puedo
   ir a la librería y comprar un manual (aunque se venden muchos), no puedo tampoco
   esperar a aprender todo una vez más, no alcanza la vida y en todo caso algunas cosas
   ya las sé y funcionan bien. Ahí es cuando miramos atrás más o menos conscientes,
   porque intervienen todos los elementos vitales y de relación, y ocurre el reciclado.
   Por alguna razón nos olvidamos como hacer equilibrio al andar en bicicleta, pero el
   auto me lo decomisaron porque no  lo pagué, y tengo que ir a trabajar, entonces
   voy al garaje y miro la vieja bicicleta de mi hijo y medio la limpio y arreglo y salgo.
   Como es de imaginar, después de quince años (y si bien no se olvida) no tengo la
   práctica, es decir, en la cabeza tengo el esquema, pero quién no… hay que subir y dar
   pedal. Pero el cuerpo no te responde como esperabas. Y nadie quiere se pelotudo
   ni se pone a practicar por la dudas un día antes; mientras salis de la negación que no
   tendrás auto por un tiempo puede pasar una vida; entonces quince minutos antes de ir
   para la oficina, te pegas un par de porrazos mientras disimulas porque la gente se paró
   a ver el espectáculo, tu mujer que te recuerda que está viejo, el nene que te mira con
   superioridad, el tiempo que corre, la angustia que viene en forma de bronca, etc.
   Fin del cuento: no llegas a tomar el bus, el clima familiar es terrible, suena el teléfono
   y es el gerente ansioso que el embarque no salió y el jefe está en un grito solo, y que
  la responsabilidad y terminás  mandándolo a la puta que lo parió. Nueva realidad:
  Sin auto, sin trabajo, sin familia, y todo por no andar cada tanto en bicicleta
  con tu hijo.
  Es irónico, contado así es irónico. El contenido de este cuento es dramático. Por estas
  cosas la gente se suicida, no se me ocurriría reírme de esto. Cuando utilizo la ironía es
  porque estoy seguro de que se está preparado para ver la realidad desde una
  perspectiva más ligera, menos grave. Como decía antes. Cuando le contás su propia
  historia decorada con humor, se alivianan, piensan que pelotudo que he sido, y la
  culpa aparece y comienza el trabajo en serio. Porque no hay culpa, nunca trabajo
  a favor de la culpa, me parece una filosofía muy paternalista, edípica, no me interesa
  la razón. Como les dije antes, les muestro como funciona la cabeza en general y en
  particular, no vendo espejitos, tengo más quilombos que ellos, será por otras razones
  pero el sentimiento de conflicto es el mismo. Rompí con la corporación del saber.
  Tengo algo y lo doy, muchas veces ni cobro, pero la gente paga igual, como dice Fito,
  el vuelto siempre es de más. Ahora no tengo ni bicicleta… igual no tengo apuro para
  llegar, me despedí hace tiempo de la gerencia. Siempre me acuerdo del gordo Edgar,
  un compañero de una barraca de cueros donde trabajé dos años, estábamos
  complicados con el patrón porque no nos pagaba en fecha y fuimos al sindicato, no
  nos dieron bola, éramos uno guachos, y me dice: y si hacemos huelga de hambre?...
  yo lo miré y le dije, te acompaño en la huelga, hambre ya hice. Nos divertimos mucho
  con ese loco.

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- Pensamos que iba a ser difícil entenderte, hablar contigo…

- Me imagino…

- Pensamos mucho que preguntar…

- Hicieron bien (risas). Enserio. (risas) Tómenme enserio… (más risas)

- Pareces una persona… muuuuy seria.

- Soy una persona…

- Has viajado mucho ?

- Dentro del país si, fuera, fui solo una vez a Buenos Aires y conocí a una chilena.  

- A quién escuchas, o tenés como referente en lo que haces ?

- A muchos… me gustan las personas prácticas. Últimamente volví a escuchar y ver al
   viejo Osho, me divierte. Moffat también es un tipo que dice en una forma muy
  particular las cosas que nadie quiere escuchar. Pero, por nombrarte a alguien y no
  dejar sin contenido tu pregunta… Soy en lector más que nada (ojalá existiera el oficio
  de leer. Sería millonario) Los tipos que más me han orientado están muertos y hace
  muchos años… porque soy lector de libros viejos. Es más, los elijo en la feria,
  me fijo en el amarillo de las paginas y el olor a viejo. A veces tengo que cortar las
  páginas porque nunca fueron abiertos. En este momento y, entre otros, estoy
  terminando de leer Los Tibault, un libro de ocho tomos que empecé hace más
  de diez años. Los encontré un día que fui a visitar un chico (Gustavo) en una clínica
  psiquiátrica. Había habido (se dice así ?) y alguien los tiró, seguramente cansado
  de llevarlo feria tras feria. De haberlos visto los hubiera comprado.

  Igual soy  un desastre, leo todo a la vez, abuso de la memoria que hasta ahora no me ha
  fallado, de ahí es que puedo decir que casi todo es cuestión de práctica.
  He leído mucho a Pichón Riviere a quién respeto no solo por su aporte a la salud sino a
  su política  de concebir el mundo, hizo con su obra, que pudiera reconocer y nombrar
  una estructura psicológica que trato de divulgar y que he visto los efectos
 en la gente, en sus cosas cotidianas. Creo que encontró una forma, de alivio a las
 tensiones diarias, que merecería un reconocimiento mayor al que tiene. De todos modos
 creo que también sabía lo que generaba y estará riéndose de eso por ahí, por lo menos
 en la memoria de la gente que lo conoció. De los que lo leyeron y comprendieron. Me
 gustan los provocadores.

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- Que hay del arte ?

- El arte es el permiso oficial a ser loco, se estudia y hasta te dan un diploma…
  Hablando en serio. El arte es la estética de la locura y si se quiere quizá sea
  el último bastión de la ética. No te digo que volvamos a andar desnudos, pero
  podríamos empezar a andar sin calzoncillos, de barba, qué sé yo… por el arte
  se comprende la lógica. Se aprende sobre la luz y la sombra.  Cierta belleza
  del horror, cierta impureza de la felicidad. La parte económica del amor eterno,
  la prostitución de la prostitución. Es el mercado negro del beso.
  La subasta de las caricias. El arte duele porque te opera el alma, sin anestesia.
  Es el parto del alma. No volvés a ser el mismo después de tu creación, por
  humilde que sea ésta. Te libera de algo que solo descubrís en el resultado final.
  García Márquez lo hizo en cien años de soledad y Jaime Ros lo puso en breves
  palabras (algún día verás que me voy a morir).
  Se aparece, y contrario a lo que creen los que venden arte, se aparece en todos, pasa
  que estamos ciegos, narcisistas.

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- Que estás leyendo ahora ?

- El diccionario.

- El diccionario ?

- El diccionario si, tengo un Everest Cúpula…se podía decir la marca ? (risas)
  Me gustan mucho los diccionarios, hay palabras que nunca escucharemos, saben qué
  significa eso?
  Palabras que no conoceremos, si fuera ministro de cultura sería lo único que
  reformaría. Sacaría una cantidad de material y pondría la lectura integra por solo
  y única vez del diccionario. Y que sirviera para validar ocho materias por lo menos.

- Porque el diccionario ?

- Porque el diccionario es como los psicólogos, se va a ellos en caso de emergencia.
   Porque es un libro casi tan extraño como la biblia, conocen alguien que la haya
   leído de principio a fin ? son libros que permiten trampas. Se abren en cualquier
   sitio y está la solución. Otro es la guía, pero no se la recomiendo a los ególatras.
   El único libro que se les parece es Rayuela de Cortazar, y quizá también en algo
   Ensayo sobre la ceguera del viejo Saramago. José estaría de acuerdo con esa
   publicación que intentamos hacer, transcribiendo cuentos en código de mensaje
   de texto (al menos creo que si…) para adolescentes.
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  Así que esperaremos ser tan famosos como ellos para publicar y hacernos ricos.
   Mientras tanto espero que esto les sirva de algo, gracias por compartir este tiempo.
   Por regalarme el honor de ser su primer entrevistado. Fue muy inteligente de su
   parte ya que si les dicen que no sirve me echan toda la culpa a mí sin prejuicio
  alguno si ?

- Gracias a vos también…cuanto es ?

- 500 pesos (risas)


(Entrevista – comprimida - que hiciéramos con tres chicos para su primer trabajo de periodismo – prensa. Por pedido de ellos accedí publicarlo. El resultado a pesar de lo que creía fue exitoso, salvaron la materia, algo que me pone feliz)